La salud es la base de la vida. Si no estamos bien de salud, no podemos funcionar correctamente. Y si no funcionamos correctamente, es difícil disfrutar nuestras vidas.
Debido a que nos encontramos justo en medio de una revolución tecnológica, la manera en que solucionamos problemas médicos está constantemente cambiando. Los fabricantes siguen impulsando los dispositivos y herramientas que usamos para mejorar nuestras condiciones de salud y nuestro bienestar. Usando estos nuevos dispositivos, los médicos son capaces de mejorar la forma en la que diagnostican y dan solución a los problemas que encuentran.
En un mercado tan competitivo e innovador, los fabricantes están buscando formas más baratas con las que puedan destacar del resto sin comprometer la calidad. Con esto en mente, los fabricantes apuntan hacia diferentes métodos para conseguir esta meta. Esta compañía encontró una forma de sobreponerse a este obstáculo y lograró fijar un rumbo que ni siquiera sabía que existía a través de la impresión 3D.
Nidek Technologies está usando la impresión en 3D para identificar problemas en el ojo y para mejorar la durabilidad de sus herramientas.
El giroscopio, un dispositivo diseñado para observar el espacio entre el iris y la córnea, ha comenzado a usar partes impresas en 3D en su fase de prototipo. Desde que cambiaron de usar partes metálicas a las impresas en 3D han logrado acelerar el tiempo de desarrollo y usar menos partes, así como mejorar el aspecto físico del mismo.
La impresión en 3D ha creado un camino de innovación que han usado en sus microscopios, algo que antes no sabían que existía. Colocando sus dispositivos en el mercado en menos tiempo y siendo ellos quienes los desarrollan y crean, Nidek ha sido capaz mejorar y optimizar su proceso, ayudando a los optometristas a cuidar de la salud de sus pacientes. Puedes ver el caso de estudio aquí.
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